El estilista rosarino Alejandro De Melo nos cuenta sus inicios en el rubro y su posterior crecimiento a nivel internacional. Destaca el valor y la necesidad de creer en el sueño propio para planificar, proyectar y trabajar. El trabajo en equipo y el networking son la base de su empresa, equilibrando la vida laboral y familiar.
El equilibrio entre el trabajo y la familia son los valores del emprendedor que no puede dejar de lado. Un emprendedor integral, se rige por muchos dominios personales y no solamente en el de los negocios. Esto no implica que deba descuidar sus inversiones, sino mas bien, sumar valor a su vida cotidiana y tomar consciencia de su entorno en general.