En un mundo de cambios, transformaciones constantes y de competitividad todas las personas requieren incorporar herramientas de diferente índole y las habilidades de comunicación no son la excepción.
El aprendizaje de diferentes disciplinas es permanente para poder potenciar la marca personal, producto y /o servicio.
En lo que respecta a los emprendedores es importante aprender e incorporar habilidades de comunicación personal para mejorar la relación con clientes, empleados, proveedores, inversores, colegas, entrevistas o columnas en medios de comunicación y videos para las redes sociales. Asimismo, muchos tienen sus espacios abiertos para brindar talleres, cursos, capacitaciones, conferencias, disertaciones y en un sinfín de oportunidades se encuentra la tarea de comunicar y/o hacer conocer el emprendimiento.
La comunicación: habilidad que conduce a optimizar el contexto
En relación a la comunicación es una habilidad que conduce a mejorar sustancialmente el contexto en donde se desarrollan.
Lo que se tiene que tener presente son varios puntos de la comunicación, por ejemplo: el mensaje que se quiere transmitir, el propósito de la marca personal, producto y/o servicio. Es decir, tener un PITCH base de los beneficios del emprendimiento. Una herramienta que aporta en este sentido es el discurso servilleta o más conocido como discurso de ascensor- Elevator Pitch. Además, el mensaje tiene que ser claro y creíble, sin interrupciones.
Por otro lado, al conversar con clientes, inversores o con quien se comunique es fundamental tener cuenta el tono de la voz, se recomienda que sea empático, agradable, amistoso, lenta la velocidad y sobre todo que se entienda lo que se está queriendo expresar.. En este aspecto, se sugiere administrar el tiempo y hacer un espacio para responder los mensajes y/o llamadas dado que la comunicación será asertiva al conectarse con ese momento para responder.
En cuanto al lenguaje no verbal, es decir, el mensaje del cuerpo comprende un factor preponderante dentro de la comunicación. En este punto son varias cuestiones a destacar: el comportamiento, la vestimenta y la corporalidad.
El comportamiento indica actitudes no verbales de las personas, una llegada tarde puede ser un indicador , si es un hábito del individuo o si es circunstancial por algún factor externo. Quizás resulta un obviedad pero es interesante puntualizar y refrescar el concepto.
Al mismo tiempo, la vestimenta y el aspecto corporal (no se habla de morfología sino tener presente el propósito y el contexto). Lo fundamental es ser conscientes que todo comunica.
Las habilidades de comunicación se entrenan como cualquier actividad física y esta es una buena noticia. Lo relevante aquí es comprender que una comunicación asertiva colabora para mejorar notablemente todas las relaciones interpersonales, profesionales y/o laborales.
Es por ello que puedo afirmar que Aprender a comunicar marca la diferencia.
Redacción: Lic. Alejandra Cordara