Volver al pasado para proteger el futuro. Esta parece ser la consigna de los cultivadores de arroz de China, Japón, Irán y Francia, que están usando patos en sus cultivos de arroz.
La demanda de comida en el mundo ha resultado en el exceso del uso de herbicidas y pesticidas. En un principio, podemos hablar de un incremento de los rindes de las cosechas. Lamentablemente, el resultado a largo plazo pone en evidencia un envenenamiento de la tierra, ya que estos agregados permanecen en los suelos durante cientos de años, envenenando también la flora y la fauna autóctona….y por traslado, también a las personas.
Una Solucion Ecológica
Los productores que han resuelto frenar este sistema, han optado por….¡criar patos en los cultivos!. Se trata de una manera absolutamente ecológica de mantener el equilibrio, sin agregar contaminantes y obteniendo cosechas libres de pesticidas. Los patos son llevados a los cultivos de arroz, que crecen en terrenos inundados. Ellos, con gran alegría, se alimentan de las malezas y otros insectos que arruinan los cultivos. Solo hay que tener en cuenta que, al momento de recoger la cosecha, hay que mantenerlos alejados, porque si no, obviamente, también quieren comerse los granos de arroz.
Todo tiene su pro y su contra
El uso de químicos agregados a los cultivos aumenta sensiblemente las cosechas, y también la cantidad de terreno sembrado,ya que estos suplen los nutrientes faltantes en el suelo. Pero estos permanecen, tanto en el producto conseguido como en el ambiente. Además, resulta en una dependencia absoluta de los fabricantes y una pérdida de la soberanía alimentaria, ya que hay que comprar las semillas modificadas a estas multinacionales. Estas solo crecen con dichos agregados que, a la larga, se instalan en todos los seres vivientes, incluida la humanidad, con tristes consecuencias que recién ahora se están empezando a estudiar.
Todo Es cuestion de decidir
Tenemos patos alegres y bien alimentados, aunque la cosecha no sea tan abundante, y personas libres de tóxicos. Los emprendedores locales que comienzan a cultivar seguramente tendrán más ejemplos de esta sinergia. Algo absolutamente maravilloso.