Pudimos compartir e intercambiar ideas desde la parte más espiritual de un negocio. Cada uno contó como desde el lado humano, creó valor a un segmento de la sociedad, generando un negocio rentable y amigable. En un momento, admito que, me sentí admirado entre tanta grandeza.
Teníamos pendiente la nota del Wake Up y le dije a Alejandro Motta que viniera al estudio para grabarla. Hicimos la preparación del tema y grabamos. En ese momento, Alejandro me propuso participar como disertante del evento junto a una persona que admiro por su trabajo: Rodrigo López Sclauzero de Info341. Además, Alejandro me invitó a cenar el día anterior con los disertantes que venían de afuera y también a realizar las notas en exclusiva con Fernando Peiró y Migue Cané.
La noche de la cena pudimos compartir e intercambiar ideas desde la parte más espiritual de un negocio. Cada uno contó como desde el lado humano, creó valor a un segmento de la sociedad, generando un negocio rentable y amigable. En un momento, admito que, me sentí admirado entre tanta grandeza. Sentí que me faltaba mucho por recorrer y mucho por vivir, pero que sin duda estaba encaminado. Fue una noche inolvidable con charlas en exclusiva con los disertantes. Hay algo casi increíble al hacer esta clase de notas más personalizadas, ya que uno tiene la oportunidad y el privilegio de disfrutar una mentoría única.
Es más, cabe destacar que uno de los principales propósitos de Nodocios, fue mi interés por aprender de los grandes emprendedores, tener el registro de sus charlas para consultarlo cuando desee y compartir el material para aportar valor en la comunidad.
Esa noche nos quedamos hasta tarde y me levanté temprano al día siguiente para repasar y cerrar mi charla. Por suerte había muchos amigos y gente conocida dentro de los asistentes, por lo que pude disfrutar y estar cómodo con mi disertación.