La innovación necesaria para emprender radica en estar atentos a los cambios y tendencias sociales. Todas las ideas de negocios se encuentran en estado potencial en la sociedad en la que vivimos. Es cuestión de agudizar la mirada.
En el marco de la inauguración del Club de Emprendores Rosario participó Nano Kigel, director del programa ejecutivo de Innovación y Creatividad de la Universidad Torcuato Di Tella y asesor de Innovación Gobierno Nacional.
Según Kigel la pregunta de fondo es ¿por qué? antes de plantearse el qué o el cómo, para poder emprender, hay que tener un porqué de fondo.
Entonces, para Kigel, el emprendedor es todo aquel que está obsesionado con resolver un problema, aquel que es capaz de entender la necesidad que pueden tener los usuarios o consumidores dentro del contexto en que habita. Así mismo, plantea un concepto interesante que es el intraemprendedor “es un emprendedor que está dentro del paraguas de una organización pública o privada. El concepto es cuando la persona puede salir de sus tareas del día a día, las tareas del rol que tiene y empezar a ver qué problemas hay adentro de la organización, en el cual él puede aportar parte de la solución o armar un equipo de trabajo multidisciplinario que la solucione. Básicamente es salir del rol. Mi tarea es abc, es decir, yo hago abc y además pienso como solucionar un problema adicional que está alrededor mío, que me toca por al lado”.
En lo que respecta a la definición de innovación, Kigel explicó que muchas veces se lo asocia a la novedad o a lo tecnológico, siendo que es algo más concreto “es crear una solución a una necesidad, básicamente en la innovación las ideas no son lo más importante, las tecnologías no son lo más importante, lo más importante son las necesidades y los deseos de los usuarios. Si yo encuentro un problema y puedo solucionarlo de una manera poco novedosa pero lo soluciono eso es innovación porque para ese mercado lo que le estas trayendo es útil”.
Para todo esto, no se puede separar la innovación de la creatividad, ambos conceptos tienen una íntima ligazón. “La creatividad no es una idea, sino una capacidad cognitiva de nuestro cerebro relacionada con nuestro instinto de supervivencia. Cuando enfrentamos una experiencia nueva, nuestro cerebro utiliza información pre-existente para elaborar una respuesta, entonces, la creatividad se puede estimular y el modo de hacerlo es moverse, salirse del lugar de confort. Si nos interesa algo, hay que investigar, buscar información, vivir experiencias nuevas, porque la creatividad surge a partir de eso”, destacó el especialista.
Innovar un negocio con empatía por Nano Kigel